El membrillo es una fruta muy peculiar, que tiene relación con la pera y con la manzana con una historia preciosa. Se remonta a los tiempos de los griegos y después, en tiempos romanos las novias lo usaban para perfumar su boca con el fin de que el primer beso no fuera desagradable.
La Fundación Española de la Nutrición (FEN) afirma que esta fruta aporta numerosos nutrientes al organismo y que es muy positiva para evitar dolores gastrointestinales y, además suaviza la digestión.

El membrillo vive su temporada alta en octubre-noviembre, aunque todavía se prolonga y pueden encontrarse en estas fechas. Seguro que todos habéis oído hablar del veranillo del membrillo, ¿verdad?
¿Qué propiedades tiene el membrillo y qué se puede hacer con él? Como propiedades podemos hablar de la vitamina A (necesaria para el cabello, la piel…) potasio, calcio o magnesio. Si por el contrario se opta por el dulce del membrillo, desaparecen todo lo nombrado anteriormente y sube el nivel de azúcar, por lo que ya no es tan sana su consumición y hay que hacerlo con moderación y cuidado. Seguro que también habéis escuchado alguna vez sobre una propiedad un tanto «especial» que nosotros no nos empeñaremos en negar en favor continuar con las leyendas populares.